miércoles, 8 de agosto de 2012

jueves, 26 de julio de 2012

El próximo fin de semana, estaremos en el MERCADO ROMANO del Burgo de Osma.
Buena excusa para visitar una de las ciudades más bonitas de Castilla, disfrutar con su gran oferta gastronómica y sus excelentes vinos.
¡Os esperamos!

jueves, 18 de septiembre de 2008

LOS NIÑOS DE BRONCE



Ha cambiado el aire y las ráfagas que hacen bailar la veraniega cortina de cañizo bicolor colgada en la calle-escaparate, son ya promesa en firme de bajonazo térmico y otoño inevitable.
El penúltimo “bou” del año, espera la embolada en los corrales de la Plaza de toros. Será esta noche y será en honor de la Virgen del Llosar, blanca en su cara hermosa de Vilafranquina. Negra, como todas las “encontradas” que esperan a la estrella Spica para anunciar, igual que la cortina danzante al son del viento gélido, que la tierra se prepara para el descanso después del tiempo de los frutos y la sofoquina.
Al portón de la Plaza le ha crecido hace apenas siete días, un vecino de bronce. El “Niño de la Estrella”, Silvino, el torero nacido en la remota aldea de la riada, aquella que segó tantas vidas y se llevó por delante casas y haciendas, a los pies de un templo tan grande que nadie entiende el por qué de su construcción en el embudo del barranco, a kilómetros de ninguna parte, si no es por las leyendas que sobre el lugar corren y enlazan su existencia a la de algunas desgraciadas mujeres que parieron allí los hijos no queridos de nobles y prelados. Para eso, dicen, se construyó el Convento; para esconder vergüenzas entre tocas de monja y peñascales.
Moreno, de grandes ojos oscuros, alto, guapo y “templao”, el “Niño” saluda al graderío, al respetable público de esta localidad, muleta plegada en la izquierda, montera en la derecha. Alzando al cielo ambas; montera y mirada, en una muda petición de suerte.
Si no fuera porque también es de bronce, la falda de “La Niña de las medias” estaría bailando –quizá lo hace de todas formas- como aquella de Marylin, esta tarde de viernes llena de catalanes buscadores de setas y de ráfagas frías del nordeste. Ella, que nunca llevó seda sobre las pantorrillas porque el jornal de tejedora no permitía esos gastos, no teme ahora al invierno. Tiene quien le caliente el corazón y está feliz… Se le nota en la cara y en el moño.
Esta noche, mientras Octubre entra por la portera abierta que le dejó Septiembre, mientras el penúltimo “bou” brama chispas y cohetes desde las astas; que nadie se sorprenda si los pedestales están vacíos al toque mágico de la medianoche. Puede ser el efecto del orujo… O que andan los dos niños arrullándose amores al resguardo de los arcos en el Llosar, sin cuidado ni miedo a la sorpresa, porque la Marededeu se ha llevado a los Santos de “embolá” y solo el viejo pícaro olmo, mira… Y sonríe.

martes, 19 de agosto de 2008

En estos sitios no se puede tirar basura


¡¡¡Por fin!!!

La expo de fotos ya está colgada sobre la pared del Forn en Larocamágica - Castellfort para los amigos-.

Un curro... Pero ya está.

Al final y ante la imposibilidad de hacer "forats" en la recien rehabilitada sala, opté por pegarlas con cinta de doble cara sobre los cartones que veis.

La cosa es que la tal cinta estaba pasada... O era un ful del Estambul, y los cuadritos comenzaron a caerse cual frutas maduras. Cristales rotos, fotos hechas un merdé... Loctite y tente tieso.

La cuestión es que es mi primera exposición -no tengo morro ni ná- y estoy contenta.

Pasaros a verla y nos hacemos unas cañas.

lunes, 4 de agosto de 2008

la expo del agua



AGUA.

Se fueron los mayores de mi pueblo a la Expo que han montado en Zaragoza. He de decir que son gentes de buen conformar, de los que con poquito, ya son la mar de felices. Por eso me los creo a pies juntillas cuando cuentan al regreso que, si exceptúas el Pabellón de la Comunidad Valenciana, que tiene unas fuentes “d’allò mes majes”, y unas “cascadas” que había a la puerta de entrada en el recinto, el único agua que vieron fue la del Ebro… Y cuando se asomaron al Puentepiedra. Por lo demás, un botellín tres euros.
Cuentan y no paran sobre la desorganización que les tocó sufrir para acceder al recinto. Quien comparaba con la otra Expo, la de Sevilla –que tampoco fue como para tirar cohetes en lo tocante a organización - y aseguraba que, aquella… ¡Muchismo mejor, dondevaaparar! Colas interminables en las que el orden brillaba por su ausencia y el personal, mezclado a la buena de Dios, sacaba a relucir sus peores instintos cuando barruntaba que se le estaban colando. No hubo “mantinaes” de milagro.
Mas colas para entrar en los pabellones que merecían la pena y todavía mas –Manolo dixit y si lo dixit es porque lo padeció- para poder tomarte una caña, a un precio aún mas prohibitivo que la mineral de marras.
Sentarse en algún lugar sombreado a comer el bocata que llevaron de casa -¡menos mal que se les ocurrió, porque si no, no comen!-, fue tarea imposible. Todos los bancos estaban al sol. Al final, con la torradera zaragozana atizando estopa –que hay que ver como aprieta el termómetro en la patria de la Pilarica cuando se pone-, se sentaron en el suelo aprovechando la escasa umbría del pabellón de Kaza-jistan, que les sonaba como mas del terreno por la cosa las perdices mayormente, hasta que vino un propio y les llamó la atención. Hay que decir que pasaron del propio y siguieron a lo suyo, como es lógico.
No hay agua en la Expo del agua según los sabios mayores de mi pueblo, excepto si te asomas al padre Ebro... Y el río tampoco anda sobrado. Dicen los otros sabios, los que tienen carrera y masters en meteorología, que en los próximos diez años y al paso que va la burra, perderá el treinta por ciento de su caudal. Como lo leen. Si esas cifras llegan a ser reales ¡A ver quien es el guapo que propone trasvases en lo sucesivo! Aunque sean tan “trasvasillos” como los que casi perpetra el Gobierno si no llega a llover a cantaros sobre Barna y aledaños.
No hay agua en la expo del agua, pero… La han encontrado en Marte ¡Albricias! Alguno anda ya pensando en el tren galáctico con tripulación catalanoparlante, que se la lleve directa a la piscina. ¡Será por esfuerzos gubernamentales!

lunes, 30 de junio de 2008

FEDERICO


Mi amigo “el insigne” le llama “Venenico” a Federico. El sabrá por qué. Quizá porque los buenos venenos, como las mejores esencias, se guardan en frasco pequeño. El periodista no tiene mucha estatura, la verdad, pero para que una voz llegue a todas partes y lo haga “en alto”, solo hace falta un micrófono… Y suficientes oídos para escuchar lo que desde él se dice. Luego el EGM contará lo que le parezca, pero Federico dispone de ambas cosas a pesar de todos los pesares. Podrá gustar o no, podrá mosquear a más de cuatro y, en cambio, alegrarles las campanillas a sus seguidores fieles. Se podrá estar de acuerdo o no con sus análisis personalísimos de la actualidad política y social. La cuestión es que lleva años haciendo lo mismo; decir lo que piensa sin pensar demasiado en las consecuencias que pueden derivarse de esa actitud. En un País libre – y este ¿lo es?- el ejercicio de la libertad individual solo termina cuando se comienza a invadir la de los otros. Para resolver donde acaba el terreno de uno y comienza el del vecino, están los Jueces en cualquier caso.
Jiménez Losantos no ha cambiado. Sigue siendo el mismo, con sus lealtades y sus pullazos más que previsibles. Entonces ¿Qué ha ocurrido aquí? ¿Por qué muchos que antes del episodio Gallardón le idolatraban como el paradigma de lo que ha de ser un informador, hoy le defenestran? ¿Por qué le dejaron literalmente con el culo al aire en el juicio sus más queridos, admirados y defendidos políticos, con o sin mando en plaza?
Cuentan las crónicas que cierto día un poderoso mandatario observó desde su cochazo a dos hombres devorando a grandes bocados la hierba que crecía en la cuneta. Tras ordenar al chofer que se detuviera, el prócer descendió y dirigiéndose a los dos individuos, quiso saber por qué estaban alimentándose de aquella extraña forma. “No tenemos dinero” contestaron ambos. “Somos tan pobres, que solo nos queda la hierba si no queremos morir de hambre”.
“¡Esto no puede ser de ninguna manera!” dijo el político. “¡Suban ustedes inmediatamente al coche, y vamos a mi casa. Están ustedes invitados. Faltaría mas! ” Una vez acomodados en el super-buga, aquellos pobres sujetos no encontraban palabras para agradecer suficientemente la generosidad del prohombre. “¡Gracias… Mil gracias… Nunca hubiéramos imaginado que Usía pudiera ser tan buenísimo… Otra vez gracias!”
“Nada, nada. No hay de qué” respondió. Y alzando la mano por encima de su cabeza, añadió: “¡Si tengo yo el césped del jardín… Así de alto!”
Moraleja: Cuando un político hace algo por ti, pregúntate por qué lo hace.
¡Que parece mentira, Federico! A estas alturas y con la de tiros que llevas pegaos.

jueves, 12 de junio de 2008

¡QUE CRUZ!


“Riiinnng….Riiinnng _“Teléfono para desahogos, dígame”
-“Mire, pregunto por la señora esta. Por la nueva.”
-“Ya. No es usted la única que pregunta, pero es que se ha ido a buscar miembras y no está. ¿Quería usted algo en especial?”
-“Pues mire, si. Quería decirle a esa niñata tonta del culo, que cuando le venga bien, se de una vueltecita por el piso de acogida desde el que estoy llamando, y le cuento yo con una demostración en directo, como se ponía el h.d.p. que casi me mata a palizas, cada vez que le “pegaba al trinqui” y volvía a casa con ganitas de bulla”
-“Ya… Pero verá usted, es que ha marcado el número equivocado. Este está para que llame precisamente el h.d.p. ¿me comprende?”
-“Pues no. No le comprendo. Y no le comprendo precisamente porque cuando el h.d.p. se pone como se pone… La última vez me rompió una pierna y dos costillas, ¡Que venga ella a pasarle el móvil, a ver si le relaja!
- “Desde luego… ¡Hay que ver como son ustedes las maltratadas! Que poquita consideración tienen con esos pobres hombres, abocados seguramente por la dureza de su vida y por los muchos disgustos y las muchas preocupaciones, a un estado mental del que no son en absoluto responsables. ¿O le parece a usted poco tener que mantener una doble personalidad durante todo el día? Tener que aparentar frente a familiares, vecinos, amigos y compañeros de trabajo, que son personas normales y felices, y por la noche en casa convertirse en unos bestias? ¡Eso tiene que desgastar muchísimo! ¿Cómo no van a arrearle al “trinqui”? ¡Es que no tienen ustedes caridad cristiana! Por otra parte, ¿Se da usted cuenta del mucho bien que me está haciendo a mí personalmente y a unas cuantas docenas de colegas con carné, el curro este del telefonillo? ¿Pretende usted acaso dejarnos sin faena, ahora que hemos pillao la canonjía? Para que lo sepa, en marcha están varios servicios similares dedicados en cada caso a esas victimas de la sociedad que son los delincuentes. Habrá un teléfono para desahogo de terroristas, otro para traficantes de drogas y armas, otro para violadores y pederastas, otro para ladrones, otro para transgresores del código… ¡Lo que sea, con tal de que se desahoguen las criaturas, y no delincan!”
- “Ya. Oiga ¿Y para prevaricadores, especuladores inmobiliarios y gilipollas peligrosos? ¿Para esos también habrá teléfono? ”
- Tut…Tut…Tut…Tut…